No existe ningún tipo de entrenamiento que pueda eliminar
completamente la posibilidad de que una persona que trabaja con víctimas y
cantidades importantes de lesionados y cadáveres en el marco de una situación
de desastre, sea afectada en el orden psíquico. Los trabajadores de emergencias
enfrentan situaciones específicas, como pueden ser la falla en la misión, la
vivencia de excesivo sufrimiento humano, las muertes traumáticas, los cuerpos
mutilados o quemados, las situaciones amenazantes para su propia integridad
física, la pérdida de compañeros de equipo o presenciar accidentes masivos .
Entendemos como equipos de primera respuesta al conjunto de
personas que integran una determinada organización y prestan sus servicios en
los momentos iniciales en situaciones de emergencias o desastres en diferentes
funciones de primera línea, como ayuda humanitaria y servicios de salud, y
otras labores operativas de campo, como el combate de incendios, el rescate de
personas, la atención de heridos, etc. Todas las personas que realizan este
tipo de trabajo, ya sea por largo tiempo o durante una sola experiencia, son
vulnerables al estrés.
El estrés agudo es uno de los riesgos ocupacionales más
graves en el servicio de emergencias, porque afecta la salud y el desempeño en
el trabajo, así como la vida familiar y espiritual.
El evento traumático puede producir una serie de reacciones
emocionales, conductuales y fisiológicas, y tiene el potencial de interferir en
las habilidades para actuar en el lugar de las operaciones en forma inmediata
o, posteriormente, en el retorno a la rutina laboral y familiar . Los problemas
emocionales también pueden promover el mayor consumo de alcohol o drogas.
Es responsabilidad de los líderes proteger no solamente la
salud física sino también la salud mental de los integrantes de los equipos de
respuesta como única garantía para cumplir con éxito las tareas y proteger al
personal contra los efectos destructivos del estrés.
El trabajo en desastres y emergencias incluye el
enfrentamiento a situaciones estresantes, como las siguientes:
• Largas horas de esfuerzo continuo.
• Lucha contra el tiempo por salvar vidas.
• Trabajo en ambientes adversos (estructuras colapsadas,
derrames químicos, etc.).
• Trabajo en condiciones climáticas adversas (lluvias
persistentes, réplicas de sismos y otras).
• Labores pesadas (como remoción de escombros).
• Presión por tener que trabajar ante la presencia de
periodistas.
• Equipo inadecuado o insuficiente.
• Alteración en el ritmo diario de vida (como dormir y
comer).
• Labor de triage (procedimiento utilizado para clasificar a
los heridos, lesionados y afectados, en el lugar del incidente, según su
gravedad y prioridad para la atención y evacuación).
• Servicios públicos esenciales destruidos.
• Presión por parte del público por encontrar a sus
familiares desaparecidos.
• Información confusa o contradictoria, rumor o
desinformación.
Factores de riesgo
Existen condiciones que influyen en la eficiencia de los
equipos de respuesta y que favorecen la aparición de problemas psicosociales. A
continuación abordamos algunos de ellos .
Factores individuales
• Enfermedades crónicas como asma, cardiopatías,
hipertensión arterial, úlceras y diabetes, entre otras.
• Problemas o situaciones previas que provocaron estrés, por
ejemplo, la pérdida del empleo, conflictos familiares, divorcio, enfermedades
de algún miembro de la familia, etc. Las experiencias traumáticas anteriores
vulneran la capacidad de resistencia y pueden dar lugar a reacciones violentas
o incapacitantes.
• La edad: los más jóvenes están más propensos a sufrir
problemas emocionales que los mayores . Se recomienda que los adolescentes y
jóvenes sean destinados a labores administrativas u organizativas y se evite
exponerlos a situaciones de gran sufrimiento humano.
• Pérdidas personales o lesiones: en ocasiones, los
integrantes de los equipos de ayuda han perdido familiares cercanos o bienes
personales en el desastre; esta situación los puede incapacitar para tomar
decisiones objetivas o hacer perder la concentración necesaria para realizar
sus labores.
• El personal de respuesta puede resultar lesionado por las
labores encomendadas y tener que ser retirado del lugar; los sentimientos de
frustración y de culpa pueden ser muy grandes al sentir que no pueden seguir
realizando las acciones para las cuales han sido preparados.
• Las primeras personas que llegan a la emergencia, o los
que tienen mayor contacto con las víctimas, tienen más problemas psicológicos
que los que van llegando posteriormente debido, fundamentalmente, al impacto
visual que puede ejercer la magnitud de la devastación sufrida y el estado en
que se encuentren las personas o los cadáveres.
Factores interpersonales
• Las responsabilidades laborales pueden generar situaciones
de conflicto con la familia, por ejemplo, por un lado, querer participar en las
labores de la emergencia, y, por otro, la presión familiar para que se cumpla
con las responsabilidades, en especial, si se tienen hijos pequeños o
familiares enfermos.
• El tiempo prolongado de separación de los integrantes de
los equipos de respuesta de sus estructuras de soporte social (familia,
comunidad, amigos, etc.) puede generar sentimientos de nostalgia y de haber
sido olvidados.
• Muchas peculiaridades propias de cada personalidad (humor
negro, conducta desconfiada, tardanza, mal humor, etc.) son normalmente
aceptadas; sin embargo, en situaciones de emergencias y cuando los colectivos
están bajo presión prolongada, pueden causar conflictos interpersonales.
Factores comunitarios
• Los medios de comunicación social y los curiosos en la
escena de la emergencia pueden contribuir a aumentar la presión emocional sobre
los equipos de respuesta.
• La presencia de grupos armados o de violencia política
hace que el desempeñar labores humanitarias incremente el riesgo y la tensión,
en especial, si hay antecedentes de violaciones de los derechos humanos,
secuestros y muertes que involucran también a los integrantes de los equipos de
respuesta.
Estímulos traumáticos
A través de sus experiencias, los integrantes de los equipos
de respuesta han aprendido una serie de
estrategias para evitar quedar
inmovilizados por las escenas de un desastre. Sin embargo, hay algunos
estímulos traumáticos que afectan seriamente a este personal como, por ejemplo,
los siguientes:
• Entrar en contacto directo con víctimas durante un tiempo
prolongado, mientras luchan por lograr su rescate o atención; en ocasiones,
algunas de ellas mueren.
• Encontrar cadáveres de niños o con graves heridas; el
personal tiende a identificarse con ellos, en especial, si tienen hijos con
edades similares.
• La presencia de gran número de cadáveres, en especial, si
están seriamente mutilados o tienen varios días, o si descubren conocidos entre
ellos.
PREVENCION Y MITIGACION DEL STRESS EN EMERGENCIAS
Es responsabilidad de los oficiales que poseen comando y
poder de decisión el cuidar no solamente la salud física y mental de los
integrantes de los equipos de respuesta como única garantía de cumplir con
éxito la misión encomendada y proteger al personal contra los efectos
destructivos del stress-trauma.
A continuación se analizarán varios aspectos que se tienen
que tener en cuenta par mantener la operatividad de nuestros equipos de
respuesta y evitar que sucumban bajos los efectos del stress.
A. NUTRICION:
B. ACTIVIDAD FISICA
C. SALUD MENTAL
1.El principal objetivo inmediato con los trabajadores de
los equipos de respuesta que participan en un desastre o se ven involucrados en
un incidente crítico en stress es el de minimizar la severidad y duración del
trauma emocional.
2.Se debe permitir la expresión de sus emociones y ayudarlos
a entender y comprender sus sentimientos y los efectos psicológicos que puedan
aparecer algunas semanas después.
3.Existen técnicas de desmovilización psicológica que se
orientan a los objetivos planteados líneas arriba y se conoce como
"Debriefing", el cual puede ser espontáneo o dirigido, esta acción la
puede realizar personal entrenado pero de preferencia por psicólogos,
previamente capacitados.
4.Con la finalidad de evitar la fatiga emocional, y la
aparición de errores por parte de los equipos de respuesta en situaciones de
desastre se sugiere el siguiente horario de trabajo: 12 horas de trabajo por 12
de descanso, durante la primera semana. Posteriormente 5 días de trabajo por un
día libre y en condiciones extremas de alto riesgo 2 horas de trabajo por 15
minutos de descanso.
5.El "Debrifing" debe de ser aplicado
inmediatamente después de una situación de incidente crítico en stress, se
pueden realizar mini debrifing, en los intervalos de descanso.
6.Después de una semana se debe de realizar un seguimiento y
reunión con el equipo para evaluar su readaptación a la rutina laboral y
familiar.
7.El Debrifing no es una reunión de crítica ni de poses de
dureza emocional sino es más bien una oportunidad en la cual el trabajador del equipo
de respuesta puede expresar sus emociones y sentimientos, y ser comprendido,
manifiesta sus síntomas físicos y psicológicos que puede estar sintiendo
aprende a reconocerlos como reacciones esperadas en estas circunstancias y se
prepara para reintegrarse a la rutina diaria.
8.Al término de una emergencia que a significado situaciones
de alto riesgo o peligro para los equipos de respuesta, o a demandado gran
agotamiento de éstos equipos, se recomienda al retorno a la base una breve
sesión de "Desmovilización" (defusing), el cual se aplica el mismo
día y en forma inmediata, no requiere la presencia de un profesional psicólogo,
y permite la ayuda a estabilizar la situación y mitigar el impacto, bajo la
consigna nadie debe de regresar a sus hogares o labores acostumbradas sin antes
haber pasado por esta actividad.
9.El "defusing" debe realizarse en forma inmediata
y antes de realizar cualquier otra tarea de limpieza o arreglo personal, no es
una sesión de critica, más bien de comentario y desfogue emocional, puede durar
minutos u horas, los miembros del equipo se sientan en circulo y en intimidad,
tiene una fase de introducción en la cual se indica lo que se va a realizar,
una de exploración de las emociones y otra de información sobre lo esperado en
situaciones de stress, y su carácter pasajero.
D. SOPORTE PSICOSOCIAL
1. Bourne (Neurofisiólogo-USA) que realizó trabajos en
Viet-nam, manifiesta que aún en situaciones muy peligrosos, si el individuo
siente que cuenta con el apoyo del grupo, tiene la noción de que domina la
situación y siente que desempeña una función social muy importante, quedará
protegido contra los efectos negativos del Stress.
Es decir, existen ciertos factores psicosociales que
protegen al individuo de los efectos dañinos del stress, así este se encuentre
en circunstancias extremadamente peligrosas y esto tienen que ver con el grado
de camaradería, compañerismo e integración del grupo del cual forma parte, de
la confianza que tiene en sus conocimientos técnicos y el dominio que le permiten
estas habilidades y conocimientos para poder manejar y dominar las situaciones
por complejas que éstas sean, y por último del grado de convencimiento de que
está realizando una misión muy importante y apreciada socialmente,
contribuyendo a aliviar el dolor, el sufrimiento y a salvar vidas humanas.
2. Rof Carballo (Neurofisiólogo español) manifiesta que un
sujeto expuesto de caer en una situación de stress, si cuenta con una confiada
relación con un confidente, o si tiene alguna persona que lo apoye o si tiene
un respaldo afectivo de amistad, amor; quedará protegido de los efectos
negativos del stress.
Rof Carballo, presenta un enfoque diferente al anterior, el
prioriza el respaldo afectivo como protección al stress, en esto se respaldan
algunos trabajos que indican que las personas solas, sin pareja se encuentran
en desventaja frente a los casados o los que tienen pareja, cuando sufren el
impacto de un incidente crítico en stress, de lo que se deduce que es de vital
importancia que en las Instituciones que forman parte de los equipos de
respuesta, se promuevan y fortalezcan los lazos de unión entre los diversos
grupos familiares de cada uno de sus integrantes a través de reuniones de
confraternidad que permitan conocerse y ayudarse mutuamente cuando el caso lo
requiera para disminuir el impacto emocional de un incidente crítico en stress,
y que les proporcionen la comprensión necesaria a su retorno al hogar, después
de haber participado en un desastre.
3. Los grupos familiares deben de conocer las reacciones
psicológicas del stress post-traumático afín de poder identificar los síntomas
oportunamente, comprenderlos, y solicitar la ayuda correspondiente.
Recomendaciones para los líderes de los equipos de respuesta
Los líderes o personas con responsabilidades en los equipos
de respuesta deben tener presente las siguientes recomendaciones, con la
finalidad de facilitar el trabajo, mantener la motivación y la moral, así como
para cuidar la salud mental de sus subordinados y compañeros de tareas:
• El reconocimiento público y oportuno por el esfuerzo
desplegado es muy importante para mantener la autoestima y la confianza del
personal.
• Asegurar un mínimo de condiciones en el trabajo, como
facilidades de servicios higiénicos, alimentación apropiada y oportuna, agua
potable, un lugar de descanso lejos de la escena del desastre y establecer
horarios de trabajo.
• No permitir que el personal retorne a su rutina diaria sin
antes haber pasado por un proceso de apoyo psicológico, que consiste
básicamente en dar la oportunidad para que puedan expresar libremente sus
sentimientos, lo que piensan sobre lo ocurrido, las acciones que se han
realizado y qué es lo que más les ha afectado en la labor realizada; así mismo,
se les debe instruir sobre los posibles síntomas que pueden experimentar en los
días subsiguientes y otras recomendaciones (por ejemplo, alimentación,
ejercicios, etc.). Esta atención puede realizarla el personal de salud mental
asignado al equipo de respuesta.
• En caso de que algún integrante de los equipos de
respuesta sufra una lesión importante, debe ser atendido y evacuado
inmediatamente. Su permanencia prolongada en el terreno de trabajo tiende a
desmoralizar al resto de los integrantes.
• En caso de un incidente que involucre a un integrante de
los equipos de respuesta, evite que la familia se entere por la prensa u otras
vías alternas; debe movilizarse un grupo de intervención en crisis para
informar y atender a la familia.
• Cuando no es posible rotar al personal porque la situación
no lo permite, una estrategia alterna es la de reasignarlo a tareas diferentes.
Esto facilita que se rompa la visión en túnel que frecuentemente acompaña a un
estrés prolongado, que se presenta por el trabajo agotador.
• Se debe tener presente que los líderes también pueden
afectarse emocionalmente. Un líder agotado puede fracasar en su labor de
dirección.
Conclusiones
• Por las condiciones propias del trabajo que se realiza en
situaciones de desastres y emergencia, todos los trabajadores de los equipos de
respuesta se afectan psicológicamente en mayor o menor medida.
• La habilidad del personal disminuye por la fatiga y se
comienza a cometer errores que pueden ser fatales.
• Los integrantes de los equipos de respuesta deben ayudarse
entre sí a reconocer sentimientos de tristeza, duelo, agotamiento, etc.
• Los trabajadores deben ser rotados en sus tareas para
evitar la exposición prolongada al estrés.
• El regreso al trabajo y a la vida familiar puede resultar
difícil después de un desastre.
• Los equipos y profesionales de salud mental deben
priorizar entre sus tareas la asistencia a los miembros de los equipos de
respuesta.
• El ejercicio físico, practicado de manera regular, es una
eficaz medida preventiva contra el estrés y aporta efectos beneficiosos.
• La alimentación para el personal involucrado en una misión
prolongada debe ser de gran interés para los directivos de los equipos de
respuesta, si desean tener al personal activo y funcionando.
Recopilacion de informacion en:
By,
KRAD Noviembre 2013
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